El rector de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), Jorge Calzoni, sostuvo que en la institución académica se han “congelado gastos prácticamente en todo, el problema es que pareciera para un montón de gente que no pasa nada y que todo sigue igual". "Hay universidades que les han venido tarifas de manera tal que ya no las pueden pagar, otras están tomando deuda con aportes, unos utilizan recursos que preveían para otros destinos, no hay una comprensión cabal del problema, se cree que se puede sostener esto en el tiempo”, cuestionó.

En contacto radial con Política del Sur, el titular de la UNDAV se refirió a la decisión tomada por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) de convocar a una marcha para el 23 de abril y de “abrir una mesa de diálogo, pero no se encontró una respuesta lo mas rápido posible ante una situación muy compleja al funcionamiento de las universidades porque no hay margen para continuar”.

“Son recursos lo que estamos discutiendo, no ideologías. Recursos para funcionar, para servicios y cuestiones muy básicas. Se intenta confundir y se plantean cosas extrañas. En la discusión salarial hubo retracción en los salarios docentes. La situación de la economía real es muy complicada y eso impacta en las cursadas. Es una situación absolutamente pragmática”, sostuvo.

En es línea remarcó que “la universidad tiene unas prácticas que ojalá la política lo repitiera” y ejemplificó que en el CIN “se trabaja en acuerdos y siempre alguien cede para lograr algo en conjunto y eso no pasa en la política argentina donde se intenta imponer”. Subrayó que “hay un hastío en la sociedad con respecto a eso”.

También rechazó los dichos del subsecretario de Políticas Universitarias, Alejandro Álvarez, que sugirió “recortar gastos superfluos”. “Con el 5% del presupuesto destinado en Educación no hay mucha posibilidad de gasto superfluo, estamos planteando piso de funcionamiento mínimo”, afirmó.

“Siempre se cuestionan los gastos universitarios y la verdad que no hay mucho margen porque tenemos auditorías, tenemos rendición de cuentas todo el tiempo. Además no tenemos muchas licitaciones y son obras con créditos externos, así que hay un seguimiento del organismo externo que pone su parte”, enfatizó.

Intención de penar "adoctrinamiento" en escuelas

Cuando se le consultó por la iniciativa de implementar una línea para denunciar adoctrinamiento en la ámbitos educativos, Calzoni entendió que es “peligroso porque puede dar lugar a persecuciones tanto a profesores como a estudiantes”. “Entiendo la intención de evitar la bajada de línea pero esto no invalida la opinión del otro y un docente presenta una planificación a principio de año y después los estudiantes hacen una encuesta calificando”, comentó.

Recordó que “la reforma de 1918 planteaba la libertad de cátedra” y si bien añadió que “es muy difícil evaluar lo que pasa en cada una de la aulas”, “los estudiantes tienen herramientas para denunciar esto, que a veces son ciertos pero a veces es que un profesor no le gustó”.